¡MAGNÍFICO!

Como dice Fabri, el Cartagena si quiere ser líder tiene que saber competir, y contra el Real Madrid Castilla lo ha hecho. Salió a morir dentro del campo y a comerse el balón en cada control del rival. A los seis minutos consiguió el primer gol obra de Miki Roqué tras no dar el balón por perdido tras un despeje dentro del área.
El resto del partido fue un "toma y daca" de ambos conjuntos que contestaban con peligrosas jugadas de ataque. No obstante, el 1-0 que manejaba el Cartagena le permitía usar las contras como arma mortífera frente a un Real Madrid Castilla muy dolido por los últimos resultados cosechados y que no deseaba ceder el liderato.
Al final, las 4000 almas que se dieron cita en el Cartagonova pudieron gozar con la victoria.